the big D

Parece que el divorcio es cada vez es más común.

Y aunque los papás siempre se preocupan primero por los hijos muchas veces no se dan cuenta de pequeños detallitos que les afectan en gran escala.

Uno de estos detalles, probablemente de los más importantes está en el como le explicamos lo que está y va a pasar.

Pensamos en ser amables y abordar el tema con cuidado, les intentamos explicar que ahora sus papás van a vivir en casas distintas y que pase lo que pase siempre lo van a querer.

Aunque todo esto está muy bien en teoría el hijo puede estar mas preocupado por si el va a tener una casa, quien lo va a cuidar o que va a pasar con el perro.

Esto pasa porque su entendimiento de la situación cambia según su edad. En muchas ocaciones su mayor preocupación es que el no se vaya a quedar en la calle porque sus papás no pensaron en donde poner su cuarto.

Los adultos vemos el divorcio como una transacción multifacética y compleja mientras que los niños pequeños tienden a verla mas en concreto desde un punto de vista más centrado a ellos.

Entender dónde están los niños en cuanto a su desarrollo mental puede ayudarlos a ajustarse mejor a la realidad de un divorcio.

Por eso hicimos esta guía por edades donde se explica que está entendiendo y que es lo que más le preocupa.

Evita mucha confusión y dolor innecesario.

De 0 - 5 años

-Dependen de los papás o cuidadores

-No tienen habilidad para entender temas complejos o entender sus sentimientos (mucho menos hablar de ellos)

-Habilidad limitada para entender causa y efecto

-El entendimiento del mundo gira entorno a ellos

-La linea entre la realidad y la fantasía es borrosa

Estar pendientes de:

Sentimientos como miedo, enojo o inestabilidad emocional que pueden expresarse por apego exagerado, ansiedad o muchos berrinches. Un retraso en su aprendizaje como despertarse a la mitad de la noche.

Prioridades:

Cuidado consistente dándole a los hijos una sensación de estabilidad. Osea mantener su rutina normal lo más posible con la presencia de un papá o mamá que este ahí para ellos.

Los niños necesitan simples y concretas explicaciones de lo que pasa. Apéguense a lo básico, que papá se va a mudar, dónde va a vivir el hijo, quien lo va a cuidar y que tan seguido va a ver a su otro papá.

Prepárense para preguntas y denles respuestas cortas y esperen a ver si hay más preguntas. No esperen que una conversación sea suficiente, prepárense para muchas pequeñas platicas.

De 6 - 11

(de 6 a 8)

-Más habilidad para hablar de sus emociones

-Una más amplia y menos egocéntrica forma de ver el conflicto, siguen teniendo poco entendimiento de temas complejos

-Mayor desarrollo de relaciones fuera de casa (amigos)

(de 9 a 11)

-Pueden hablar más de temas complejos como al divorcio

-Ven las cosas como blanco o negro, pueden sentirse responsables por el divorcio

Estar pendiente de:

Pueden mostrar su descontento con miedo, enojo, ansiedad o tristeza.

Aveces muestran más claras reacciones a extrañar al padre ausente.

Pueden fantasear en que se reconcilien y pensar en que pueden hacer para que eso pase.

(Es importante que entiendan que son decisiones de adultos en las que no tienen culpa ni influencia.

Prioridades:

Cuidado constante y seguir con una rutina son importantes. Aunque a esta edad son cada vez más capaces de hablar de sus sentimientos no significa que quieran. Hablar del tema de forma indirecta puede ayudar por ejemplo, "algunos niños se sienten tristes, con miedo o enojados cuando sus papás se divorcian". Esto es menos agresivo que preguntar directo "Estas triste".

Libros del divorcio ayudan a los niños a enfocarse en sus emociones.

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